Teoría socialista libertaria que pertenece al segmento individualista del anarquismo
que propugna que los individuos deben recibir el producto completo de su labor.
Es favorable al mercado y libre intercambio entre productores y
a la propiedad
entendida como uso personal y usufructo. Su fin es aspirar a una sociedad libre, horizontal
e igualitaria
a partir del más amplio desarrollo económico de la individualidad. Puede ser
conocido también como anarquismo de mercado o anticapitalismo
de libre
mercado.
PRINCIPIOS
PRINCIPIOS
El mutualismo es un sistema que se basa en las
tendencias asociativas de los seres humanos para conseguir satisfacer sus
necesidades a través de la cooperación voluntaria y pacífica, la
ayuda mutua y la solidaridad en un modelo donde los productores
intercambian libremente los productos de sus propios trabajos.
Kevin
Carson explica que la visión última es una sociedad en
la que la economía este organizada entorno al mercado libre entre productores,
y la producción esté llevada por artesanos y campesinos autónomos, pequeñas
cooperativas de productores, empresas grandes controladas por los trabajadores
y cooperativas de consumidores. Al grado en el que aun existe el trabajo
asalariado (que es probable, si no lo suprimimos por la fuerza), la supresión
de los privilegios estatistas resultará en que el salario natural del
trabajador, como Benjamin Tucker
dijo, será su producto completo.
Es una teoría económica y social de carácter
evolucionista, pero eso no excluye que los mutualistas sean partidarios de la revolución social; es más, consideran ambas cosas
como parte del mismo proceso. Es el modelo económico al que usualmente se han
adherido los anarquistas individualistas, de tal
manera que éstos suelen considerar ambas cosas como más o menos lo mismo.
ECONOMIA MUTUALISTA
Consideraciones acerca del capitalismo
Los mutualistas consideran al libre
mercado y al capitalismo como dos cosas muy diferentes entre sí e
incompatibles y creen que su alternativa se presenta como el resultado
coherente de una economía de mercado genuina, sin ninguna clase
de monopolios,
que desplace o contrarreste al sistema económico capitalista.
Sostienen que el capitalismo se creó sobre "un
acto de expropiación tan masivo como el feudalismo", y afirma que el
capitalismo no podría existir con la ausencia del Estado. Afirma que
si un verdadero sistema laissez faire fuera puesto en práctica, daría
lugar a un sistema donde la capacidad de extraer un beneficio del trabajo, y el
capital serían insignificantes; el típico escenario del anarquismo
individualista. La centralización de riqueza en una jerarquía de clase se debe
a la intervención estatal para proteger a la clase dirigente, usando un monopolio sobre el
dinero, garantizando patentes y subsidios a las grandes empresas, imponiendo unos impuestos
discriminatorios, e interviniendo militarmente para acceder a los mercados
internacionales.
Principio del
coste o "coste como límite del precio"
El principio del coste fue enunciado por y sostiene que es contrario a la ética poner un precio más alto
a un producto o servicio que el coste de comprar, producir o servir y ponerlo en
el mercado. Es una interpretación estricta de la teoría laboral del valor (TLV) que
sostiene que el valor de un producto o servicio es la cantidad de trabajo
empleada en producirlo o servirlo.
Los mutualistas consideran que en un libre
mercado genuino los precios de mercado tenderían por efecto de la competencia
al precio de coste, usando éste como referencia, considerando también contadas
excepciones a esta referencia.
Propiedad
Los mutualistas rechazan la propiedad privada lockeana típica del capitalismo sobre la tierra que
entrega un monopolio sobre la explotación de la tierra al propietario evitando
el libre acceso a ésta y permitiendo que los propietarios y terratenientes
puedan dominar a los no propietarios y exigirles una renta monopólica por el
uso de la tierra y promueven una visión de la propiedad basada en la posesión y
el usufructo
(ocupación y uso), donde los individuos tengan libre acceso a la tierra.
Pierre-Joseph Proudhon
fue uno de los más famosos filósofos que ha expuesto sus ideas sobre la
naturaleza de la propiedad. Es conocido por exclamar "La propiedad es
el robo", "La propiedad
es libertad" y "La
propiedad es imposible". distinguía entre lo que él consideraba dos
formas distintas de propiedad a menudo nombradas con la misma etiqueta. Para los
mutualistas esta es la distinción entre la propiedad creada gracias a la
coerción y la propiedad creada por la labor.
La propiedad es el robo "cuando está relacionada a un terrateniente o capitalista cuyo dominio es derivado de la conquista o explotación y sólo puede ser mantenido a través del Estado, leyes de propiedad, policía, y un ejército".
La propiedad es libertad para "la familia de campesinos o artesanos que tienen el derecho a un hogar, tierras que deben cultivar, [...] como herramientas de comercio", y los frutos cultivados, pero no la apropiación o control de las tierras o de las vidas de otros.La primera es considerada propiedad ilegítima, la segunda propiedad legítima. La propiedad del producto del trabajo es esencial para la libertad, mientras que la propiedad de los recursos naturales que se aparta de la posesión (ocupación y uso) era la base de la tiranía y conduce a la sociedad (y obviamente a los individuos que la forman) a destruirse a sí misma. La apreciación de los títulos de propiedad como fuerzas destructivas y como institución ilegítima. En ¿Qué es la propiedad? Plantea:
“Si estamos reunidos con motivo de la libertad, igualdad y seguridad, entonces no estamos reunidos con motivo de la propiedad; Si la propiedad es un derecho natural, este derecho natural no es social sino anti-social. Propiedad y sociedad son instituciones absolutamente irreconciliables. Es tan imposible reunir dos propietarios como juntar dos magnetos por sus mismos polos. O la sociedad debe perecer, o esta debe destruir la propiedad. Si la propiedad es un derecho natural, absoluto, imprescriptible e inalienable, ¿por qué en todos los tiempos, ha existido tanta especulación sobre su origen?; esta es una de sus notorias características. ¡El origen de un derecho natural! ¡Oh Dios! ¿quién alguna vez estudió el origen de los derechos de libertad, seguridad o equidad? “Luego comenzó a usar el término "propiedad" para referirse a la "propiedad del producto del trabajo", idea que apoyó intensamente. Idea que mantuvo como un elemento esencial de la libertad: En Teoría de la propiedad plantea:
“¿Dónde encontraremos un poder capaz de hacer el contrapeso del Estado? Allí no hay más que la propiedad. [...] El derecho absoluto del Estado está en conflicto con el derecho absoluto del dueño de la propiedad. La propiedad es la más grande y revolucionara fuerza que existe. “Se opuso al beneficio de cualquier transacción económica, viéndolo como un pago extra sin trabajar, siendo el trabajo la fuente principal de la legítima propiedad. Los mutualistas prefieren y defienden la propiedad individual algo como esencial para la anarquía, y tienen como un objetivo básico la pequeña propiedad para así lograr el equilibrio propiedad-trabajo y asegurar un mínimo de autonomía económica al individuo frente a cualquier tipo de coacción. De esta manera piensan se cumple la definición del socialismo como "medios de producción en propiedad de los productores", en este caso de manera individual.
Como dice Benjamin Tucker: "La máxima reclamación del Socialismo [es] que el trabajo debería estar en posesión de su dueño".
Clarence Lee Swartz, dice en ¿Qué es el mutualismo?:
“Este es, por tanto, uno de los propósitos de los mutualistas, no solo despertar en la gente el aprecio y el deseo por la libertad, sino también incitar en ellos la determinación de abolir las restricciones legales que ahora existen sobre las actividades humanas no-invasivas (que no invaden la vida privada) e instituir, a través de asociaciones totalmente voluntarias, aquellas medidas que nos liberarán a todos nosotros de las imposiciones del privilegio y del poder del Capital concentrado. “Swartz también sostenía que el mutualismo difería del comunismo libertario y de otras filosofías colectivizantes por su apoyo a la propiedad:
‘Una de las pruebas a cualquier movimiento de reforma social para saber si respeta la libertad individual es: ¿Abolirá el movimiento la propiedad privada (individual)? Si es así, es un enemigo de la libertad. Uno de los más importantes elementos de la libertad es el derecho a la propiedad privada de los productos del propio trabajo. Socialistas de Estado, Comunistas, Sindicalistas y Comunistas anarquistas niegan la propiedad privada’
Asociación
voluntaria y libre intercambio
La idea del mutualismo es que los productores intercambien
libremente productos, mercancías, bienes y servicios. Para lograrlo la
producción estaría en manos de artesanos y campesinos autónomos, pequeñas cooperativas
de productores, mutualidades, negocios pequeños o familiares, empresas
grandes controladas por los trabajadores y cooperativas de
consumidores, siendo la idea de la asociación voluntaria central al sistema.
Los mutualistas creen que así se lograría una
sociedad libre, pacífica y horizontal, donde por un lado la competencia
evitaría excesivas acumulaciones de riqueza de tal manera que ningún individuo
pudiese dominar a otros y por otra parte la cooperación haría aflorar
sentimientos de solidaridad, lográndose de esta manera un equilibrio.
Crédito mutuo
Benjamin
Tucker consideró que la eliminación del monopolio de la
emisión de la moneda
por parte de los bancos centrales provocaría la caída de los tipos de
interés en los préstamos por la competencia:
“Si mil hombres que desempeñen diferentes líneas de negocios se unen para formar un banco de emisión; y si este banco de emisión se une con otros bancos similares con propósitos compensatorios; y si dicho banco presta su bien conocido crédito circulante... ¿costarían los préstamos de este banco más que los sueldos del director y asistentes, alquiler del edificio, gastos de papel e impresión, pérdidas por depreciación de valores, y gastos diversos? ¿No están de acuerdo economistas y estadísticos que un descuento del 0,5% cubre los gastos antes referidos? “Los mutualistas defienden que los bancos al estar en un ambiente de libre competencia otorgarían créditos de bajo interés (calculaban una tasa entorno al 0,5% que serviría para pagar los gastos de la transacción, no siendo por tanto una renta de capital) a los productores y trabajadores. La banca popular serviría para tener un lugar de intercambios así como para estabilizar posibles inequidades en el mercado. Los intercambios se harían directamente entre productor y consumidor o indirectamente a través de este sistema de banca popular o bancos mutualistas.
Contrato y federación
El mutualismo sostiene que los productores deben intercambiar sus mercancías a precio de coste usando sistemas de "contratos". Mientras las primera definiciones de Proudhon del precio de coste estaban basadas en apreciaciones sobre horas de trabajo, redifinió luego el precio de coste para incluir otros factores como la intensidad del trabajo, la naturaleza del trabajo implicado, etc. También expandió sus nociones de "contrato" en términos más amplios de "federación". Es posible que estas ideas desarrolladas completamente, se asemejasen a la economía participativa.
Gradualismo y poder dual
Proudhon observó que la convulsión de
“Bajo la maquinaría gubernamental, en la sombra de las instituciones políticas, fuera de la vista de los hombres de Estado y los sacerdotes, la sociedad está produciendo su propio organismo, lentamente y silenciosamente; y construyendo un nuevo orden, la expresión de su viatalidad y autonomía... “Una fórmula similar son los modelos de grupos de cooperativas actuales como Mondragón Corporación Cooperativa en España o NoBAWC en Estados Unidos. Kevin Carson considera que la distinción entre reforma y revolución "es cosa de énfasis, principalmente". Como Larry Gambone ha notado en Más allá de Karl, ¡el anarquismo ha vuelto!: La base para una revolución 'final' tiene que ser creada de antemano, y ésta es la tarea de la estructura social alternativa
La revolución de Carson sería gradual y marcada por el desarrollo de una 'situación de poder dual'. Esto requiere la construcción de una 'infraestructura social alternativa' que de lugar a formas de 'contrapoder social', tales como sindicatos, cooperativas, uniones de arrendatarios, sociedades mutualistas, 'observadores de policías' y movimientos municipalistas libertarios. Ese desarrollo es una forma de 'política prefigurativa', en la cual las personas intentan vivir la revolución ahora mismo.
Uno de los principales motivos por el que los
mutualistas apoyan un proceso gradual de desmantelado de las instituciones
estatales es el peligro de que ante un colapso repentino del aparato estatal,
sin que la población haya tejido las instituciones y las estructuras
alternativas necesarias para la autogestión, algún grupo de personas pudiera
tomar el control e instaurar un nuevo Estado.
El moderno Estado corporativo es mucho más intervencionista que su versión
decimonónica, lo cual es un problema para los anarquistas (considérese que en
muchos países el 20% o más de la población depende del Estado para el empleo o
la supervivencia).
Benjamin
Tucker vio la necesidad de una 'abolición gradual del Estado', para no dar lugar a una situación
peligrosa. Por tanto, es necesario tener una 'posición estratégica' frente al Estado.
'No basta con oponerse al estatismo como un todo... sin tener ningún concepto de cómo los ejemplos particulares de estatismo encajan en el sistema total de poder'.
Por consecuencia, el desmantelamiento del Estado
debe darse 'en el orden correcto', porque hacerlo de la manera incorrecta es
llamar al desastre. Larry
Gambone propone
“La secuencia apropiada sería, primero, eliminar todas las medidas estatales que apoyan y dan lugar al poder capitalista y burocrático. Una vez abolida la explotación del trabajo, cualquier asistencia social tendrá que ser manejada por las sociedades de ayuda mutua. “
HISTORIA
El primer uso del término "mutualismo"
para describir un sistema económico lo hizo Charles Fourier en 1922, aunque su
pensamiento económico no era coincidente con el de los autores que luego
definieron definitivamente los principios de esta teoría. El primer uso del
nombre adjetivo "mutualista" fue en el New-Harmony Gazette por
un seguidor estadounidense de Robert Owen
en 1826. William Batchelder Greene usó en 1850 esta etiqueta para
un sistema similar al de Pierre-Joseph Proudhon , la utilizó para
describir su filosofía económica también.
Las ideas mutualistas fueron en un principio las
imperantes en el naciente movimiento anarquista, los mutualistas, seguidores de
las ideas de Proudhon, participaron en los debates de la Primera Internacional, donde se enfrentaron
con Karl
Marx por la cuestión de la socialización de la tierra, idea a la que se
oponían. Cuando prosperó la moción en favor de la socialización de la tierra,
los mutualistas fueron sustituidos por Mijaíl
Bakunin, defensor de las tesis colectivistas.
El mutualismo fue implementado en la práctica por
el anarquista individualista Josiah Warren en Estados
Unidos y por otros en Inglaterra. Algunas de las experiencias mutualistas fueron
la Tienda de tiempo de Cincinnati, la Colonia
Utopía y la Colonia Tiempos Modernos. En Estados Unidos terminaron siendo el
bastión fuerte del mutualismo, teniendo de bases de campesinos, artesanos,
pequeños comerciantes,
etc. La situación también fue cambiando al principio del siglo XX, al
irse industrializando la sociedad, el crecimiento del
capitalismo fue proletarizando a los antiguos granjeros y
pequeños propietarios y estuvo en la necesidad de más mano de obra lo que
fomentó la migración de europeos, muchos de ellos anarquistas.
Bajo la influencia de la gran migración europea,
donde el mutualismo había sido dejado a un lado por el movimiento anarquista (a
excepción de algunos pocos militantes y pensadores) y el anarcosindicalismo era la tendencia en
crecimiento, la predominancia americana terminó siendo para este último. Al
principio las varias tendencias convivieron aunque con uno que otro roce en el
plano ideológico, hasta que el mutualismo fue perdiendo adherentes, cuestión
agravada por el incendio del edificio donde funcionaba Liberty
y donde además había un archivo creado por años dedicado a autores
individualistas preferentemente anticapitalistas que se perdió en su totalidad,
así el mutualismo perdió esta publicación, su más importante referente
intelectual. Por décadas el mutualismo se convirtió en una perspectiva
minoritaria y dispersa dentro del movimiento anarquista, sin embargo no dejaron
de mostrarse ejemplos de mutualismo práctico a escala reducida.
En la actualidad, Kevin
Carson ha retomado el mutualismo conjugando las ideas de Pierre-Joseph Proudhon, las de los
anarquistas individualistas estadounidenses del siglo XIX como Benjamin
Tucker, Lysander Spooner, William Batchelder Greene o Henry David Thoreau, e ideas contemporáneas
como algunos conceptos de los economistas marginalistas, presentando una
alternativa de libre mercado laissez
faire no capitalista, en un libro titulado Estudio de una economía política mutualista, en el cual
también se encuentra una análisis de la historia del capitalismo. Se
experimenta dentro del movimiento anarquista principalmente norteamericano un
renovado interés en el mutualismo y una actualización a los nuevos tiempos,
entre estas actualizaciones están: por un lado el estudio de la economía
marginalista para su revisión, y posible aplicación al socialismo
libertario o al contrario para rebatir esas ideas y propuestas, y por otro lado
la alianza y colaboración mutua con el sindicalismo revolucionario.
El
anarcosindicalista contemporáneo y experto en la
historia del anarquismo Larry
Gambone también promueve la mutualización
de los servicios sociales,
“Las instituciones gubernamentales son administradas por burócratas que no son responsables ante nadie y a menudo tratan como enfermos a sus clientes. Las corporaciones deben hacer del beneficio una prioridad sobre el servicio. El gobierno cierra hospitales aunque los lugareños estén dispuestos a apoyar esas instituciones. Los bancos cierran sucursales aunque las personas prefieran que sigan abiertas. Nada de esto pasaría con sociedades de ayuda mutua ya que son poseídas y controladas por sus clientes... “Ciertas formas de mutualismo (o aproximados) se practican hoy en día a pequeña escala como forma de contraeconomía; por ejemplo el comercio justo o la economía social comparten algunas características y filosofías con el mutualismo. También algunos proyectos de software libre como Debian, los grupos de usuarios de Linux o las comunidades Wi-Fi como Red Libre, comparten conceptos básicos típicos del mutualismo como la ayuda mutua o recíproca, la descentralización, la libre asociación y el intercambio libre .